Ya no es que tenga buena o mala labia, es que su dicción cada vez va a peor. Desconozco si su "tara" es operable, pero lo que necesita este chico es no hablar. Que alguien hable por él, que tome las decisiones por él, y aunque ahora su manager es Vicky Guerrero y puede asumir ese papel, Swagger no necesita alguien así. Mi idea se encamina más a lo que en su momento fueron Sylvester Terkay y Elijah Burke.
Este cambio de panorama variaría los aspectos que lastran su personaje. La idea es que pase a ser un tipo impasible, que se deje de gestos imbéciles y vueltecitas en el ring. Es odioso, le va bien para que la gente le abuchee, pero chorradas como ésta hace que no se le tome en serio, es un taunt del estilo de la trompeta de Santino. Absurdo. Además de ésto, y sin necesidad de abandonar su gimmick de luchador universitario-amateur que se pasa al wrestling, podría usar eso como aspecto básico y fundamental de su personalidad. Que se quede con el deporte, que sea un atleta, un deportista que sólo muestre interés en hacer su trabajo y ganar, sin importar la reacción del público. Qué él se dedique al deporte y que tenga un entrenador-representante al lado que hable, que se dedique a la faceta del espectáculo y vele por los intereses de su pupilo; y que visualmente nos ofrezca el papel del preparador que está en la esquina de su luchador como en las MMA o el boxeo. Por eso, hago mención al tandem Terkay-Burke, en el que aunque el primero resultó ser un "bluff" en toda regla, nos dejó un manager-entrenador-representante con los suficientes arrestos como para generar la reacción deseada en el público, haciendo su labor de "entertainer" a la perfección.
Este cambio de panorama variaría los aspectos que lastran su personaje. La idea es que pase a ser un tipo impasible, que se deje de gestos imbéciles y vueltecitas en el ring. Es odioso, le va bien para que la gente le abuchee, pero chorradas como ésta hace que no se le tome en serio, es un taunt del estilo de la trompeta de Santino. Absurdo. Además de ésto, y sin necesidad de abandonar su gimmick de luchador universitario-amateur que se pasa al wrestling, podría usar eso como aspecto básico y fundamental de su personalidad. Que se quede con el deporte, que sea un atleta, un deportista que sólo muestre interés en hacer su trabajo y ganar, sin importar la reacción del público. Qué él se dedique al deporte y que tenga un entrenador-representante al lado que hable, que se dedique a la faceta del espectáculo y vele por los intereses de su pupilo; y que visualmente nos ofrezca el papel del preparador que está en la esquina de su luchador como en las MMA o el boxeo. Por eso, hago mención al tandem Terkay-Burke, en el que aunque el primero resultó ser un "bluff" en toda regla, nos dejó un manager-entrenador-representante con los suficientes arrestos como para generar la reacción deseada en el público, haciendo su labor de "entertainer" a la perfección.
Completamente de acuerdo, el pasado de Swagger desde que dejó de ser campeón es para olvidar (con lo del águila tocó fondo). No es un luchador que me agrade mucho y dudo que llegue más lejos que Cody Rhodes o Dolph Ziggler, pero pueden hacer mucho más con él.
ResponderEliminarYo no creo que sus vueltas y sus sonrisas sean algo del todo malo, "swagger" viene a ser "pavonearse", pero lo del manager es esencial. Estaría bien que le pusiesen a alguien al estilo de Brutal Bob (manager de Mike Bennett).
Me alegro de que vuelvas a escribir ;D